Electromovilidad: Una tecnología que nos ayudará a ser más sustentables y amigables con el planeta
La humanidad elevada ha alcanzado un nivel tecnológico realmente en las últimas décadas, especialmente desde el 2010 con el uso de dispositivos y aparatos que le ha facilitado su quehacer diario en gran medida.
Tecnología que busca el desarrollo de una vida más sustentable y amigable con el medio ambiente, siguiendo los lineamientos de la agenda propuesta por las Naciones Unidas para el año 2030.
En esto, se establece que el planeta deberá ser carbono neutral para esa fecha, reducirá al máximo las emisiones de efecto invernadero, especialmente en los medios de transporte como los autos.
Por otra parte, la crisis provocada por la pandemia del COVID-19 y el cambio climático han acelerado las proyecciones que se tenían para la implementación de tecnologías diferentes como la electromovilidad.
Y la industria automotriz mundial dió sus primeros pasos hace algunos años atrás con prototipos eléctricos que hoy pueden estar al alcance de muchos, pero aún no de todos.
Los desafíos en esta área son muchos y muy variados pero las grandes marcas como General Motors, BMW, Renault, Nissan, Ford, Mitsubishi ya están trabajando para migrar sus modelos de auto hacía la electromovilidad.
¿En qué países se usa esta tecnología?
En Noruega, Islandia, Suecia y Finlandia, los que se han convertido en los primeros del mundo en incrementar el uso de vehículos eléctricos, esto en parte porque ofrecen a los compradores exenciones fiscales, peajes más económicos, que han sido muy efectivos para promover la electromovilidad entre la población.
Sin embargo la pandemia (con su efecto negativo en las economías mundiales) no logró opacar el auge de este tipo de vehículos ya que, según estimaciones del rastreador EV-Volumes, la venta representó el 4,2% en 2020 frente al 2,5% en 2019.
De igual forma, países como China no entraron dentro del TOP 10 de países con más vehículos eléctricos, representando sólo el 6,2% de la oferta de automóviles dentro del país.
Lo mismo sucedió con Estados Unidos, donde las ventas de este tipo de autos sólo representaron un 2,3%.
Expertos en la materia explican que este fenómeno se debe a que países como China y USA colocan fuertes restricciones e impuestos a las importaciones de autos, lo que encarece significativamente su valor para el consumidor final.
Al contrario, Noruega es un país que percibe niveles altos de ingresos, por lo que puede absorber el precios de los aranceles e impuestos de importación de los vehículos eléctricos y el costo de ellos se reduce considerablemente, lo que representa un beneficio para las personas que quieran adquirir esta tecnología.
¿Y qué sucede en Latinoamérica con la electromovilidad?
En Europa y Asia puede ser más factible que la electromovilidad se instale más rápido en la población pero…
¿Qué tan factible es implementar esa nueva tecnología en Latinoamérica?
Según las estimaciones del Statista Mobility Market Outlook, México se proyecta como el mercado más grande de América Latina al haber vendido 4.500 unidades eléctricas en 2021.
Al igual que México, el mercado chileno, ecuatoriano y argentino han iniciado la venta de vehículos eléctricos para empresas y particulares, pero la realidad es que, sus cifras de ventas aún no pueden compararse con las europeas o asiáticas ya que estas no superan el 15%.
Una de las razones más frecuentes para la baja tendencia en la compra de estos vehículos es el alto costo que tienen los modelos vendidos en la región, puesto que la mayoría de ellos son importados desde economías de altos ingresos, así como la falta de una red de infraestructura vial que soporte este tipo de nuevas tecnologías.
Debido a que existen diferencias en la implementación operativa de electro estaciones para la recarga de estos autos, por ejemplo, en México existen aproximadamente 3.000 estaciones en todo el país mientras que en Argentina solo hay 200.
Lo que indica claramente una brecha entre los países latinoamericanos al materializar esta tecnología para el uso de dominio público y/o privado, generando retrasos en su avance hacía la reducción de niveles de dióxido de carbono en el ambiente y en su inicio en el uso de estas tecnologías más sustentables para nuestro planeta.
Lo que sucede en Chile
Al ser una tecnología que solo ahora se está masificando, aún quedan muchos desafíos, especialmente logísticos y de infraestructura, para que la electromovilidad se encuentre disponible para todo el público.
Y la implementación masiva de electrolineras (que sería la versión eléctrica de una gasolinera), deben ser necesarias, además de regularizaciones que especifiquen su uso dentro y fuera de la industria.
Todo esto debe ser planificado y ejecutado en un futuro muy próximo ya que, nuestro país se ha planteado como objetivo fomentar el uso eficiente de la energía, estableciendo una ambiciosa meta de 20% de reducción de la demanda energética respecto de la proyectada al año 2025 y la electromovilidad juega un rol fundamental en ello.
Por otra parte, los avances e implementaciones tecnológicas se concentran en la región metropolitana, pero en ciudades como Iquique ya han hecho avances hacia esta tecnología.
Porque existe una electrolinera inaugurada en esa ciudad a finales del 2019 (Mall Zofri), sumándose a otras ciudades como Rancagua, Concepción, Antofagasta, Copiapó y Coquimbo en la implementación de estos dispensadores para vehículos eléctricos.
Nuestra experiencia en CamiónGO
El camión eléctrico que usamos tiene una autonomía diaria de 210 km y actualmente opera sus servicios para la planta Nestlé ubicada en Quilicura, Región Metropolitana, desde donde traslada entre 1.000 a 2.000 kg diarios en la semana.
De igual forma, se debe considerar el cálculo de la distancia y el recorrido para poder optimizar la ruta porque esto puede reflejar un ahorro del 25 al 30% de la carga de la batería y alargar la vida útil de la misma.
El manejo de este tipo de vehículos requiere un conocimiento previo por parte del conductor ya que, al ser eléctrico debe conducirse con más cuidado y atención como no transitar por charcos de aguar que pudieran mojar la batería o que no frena de la misma manera que se hace con un camión tradicional, pero hemos estado trabajando en capacitar a nuestros transportistas en la forma adecuada de conducir el camión eléctrico.
De hecho, uno de nuestros transportistas es quien ha conducido por más tiempo este vehículo, preocupándose de que se mantenga en óptimas condiciones, así como de la limpieza y el aspecto físico del mismo.
Y precisamente en abril del 2022, se realizó la mantención de este camión (que ya contaba con 10.000 km recorridos), sin mostrar deterioro alguno en su batería, la que representa la fuerza vital para este tipo de vehículos así como se constituye en el repuesto más costoso para el mismo (cuya duración máxima puede abarcar los 8 años de vida útil).
En CamiónGO estamos muy contentos con el desarrollo e implementación de esta tecnología en beneficio del medio ambiente, las personas y las empresas en general, reducen la emisión de dióxido de carbono en la atmósfera así como los costes en combustible.
Si quieres conocer más sobre estos temas, te recomendamos visitar nuestro blog